La Voz del Colibrí

Una de las cosas más raras de escribir, es que no podemos platicar, porque me gustaría mucho saber de ti querido lector, querida lectora, ¿Cómo te ha ido a ti, qué retos, sabores y sinsabores te han traído estos meses? Lo que sí puedo hacer es pensar cómo estarás. Y platicarte, si quieres, un poco de como he visto que las personas están confrontando estos tiempos.

Y sí, me gusta la palabra ‘confrontar’, porque esta pandemia es un enemigo, llega a llevarse a seres queridos, a maltratar nuestra salud y bienestar. A deshacer el funcionamiento de lo normal y de lo cotidiano, a llevarnos a encierros y a soledades para los que muchos no estábamos listos. Trabajos se han perdido, tendrán que modificarse. No sé si ya lo has hecho, pero surgen preguntas acerca de las cosas que son importantes, y las que queremos hacia el futuro.

Pero, somos mexicanos, y hay una cosa que tenemos, que es que somos tan espectaculares, tan fuertes, tan ingeniosos, con corazón bueno ¡de acero! El Covid es otro reto que la vida nos avienta. Pero vamos a poder, podremos y también vamos caminando, alcanzando aprendizajes que se convierten en herramientas y capacidades para lo que decidamos que será el futuro de nuestro mundo.

Así también, nos tenemos que despedir de mucho. De personas, de apegos, de costumbres, ¿de miedos? Y sé que es difícil pero vamos encontrando los nuevos caminos y las nuevas formas en las que la sociedad nos va dando ese espacio de valor que cada uno de nosotros tenemos. Otras pandemias en el pasado han roto inclusive con el feudalismo, con el servilismo que le hemos dado a instituciones como la iglesia, el estado, las universidades, los bancos. Así es, las revisiones son profundas.

Y así una de las áreas de enriquecimiento es en los cambios de mentalidad, que se convierten en nuevas actitudes, con ello en acciones, y esto en resultados. Esa es la progresión a partir del estado de victimización a salir victoriosos.   

Entre los estados mentales esta decidir si tendremos una mentalidad de abundancia, contra una de limitaciones. Las de encontrar, que si las cosas han cambiado, entonces también habrían nuevas oportunidades. Como surgen cosas positivas, por ejemplo mayor amabilidad, o ¿reencuentros con viejos amigos y personas?

Otro estado de actitud, es rehusarnos a ser víctimas y resolver y salir adelante. Esta actitud de una vez que hemos resueltos lo más crítico, entonces volvernos a poner de pie como todo un Rocky Balboa y decir el clásico “échame otra” y “estamos de regreso”. Y un aprendizaje maravilloso en estos es que, aún desde la soledad de cada encierro, hay más como tú, más como yo, solo tenemos que abrirnos, acercarnos y reconectarnos.

Tener una actitud de crecimiento, contra una de pensamiento fijado en lo viejo. Estamos obligados a crecer, a mejorar, a ser nuestra mejor versión.  A cultivar pensamientos positivos, cuando las patrañas quieren anidar en nuestras mentes. Dejemos la terquedad y abramos nuestras mentes.

Por supuesto, ‘estar agradecidos’ es uno de los secretos que menciona Caitlin V, youtuber, quien es la fuente que tome para esta nota. Ella, Caitlin, menciona que la actitud de ‘agradecimiento’ ha sido resaltada en incontables estudios para construir un estado mental fortalecido. ¿Hay que agradecer en esta pandemia? Si lo hay. Al final nos quedan las lecciones y el amor.

La pandemia abre puertas hacia descubrirnos como personas compasivas, o egoístas. Ponernos en los zapatos de otros, reconocernos, apoyarnos, y hacer espacio para personas de todos sabores y colores. ¡Claro!, siempre estableciendo los límites que cada uno tiene para nuestro mayor beneficio. Sin duda también nuestro propio ser y protegernos a nosotros, es algo que una pandemia nos muestra.

Una mentalidad abierta, en contra de cerrada. Nos puede llevar a muchas cosas, a comprender mejor el entorno, las situaciones, distinguir entre los mensajes flotando por todos lados, poder desarrollar soluciones, y ¿por qué no? También a encontrar fuentes de aventura, a superar los miedos, a tomar nuevos cursos, hacia nuevos destinos.

Finalmente, estas claves, resultarán en fortalecida y ¡superviviente! confianza, que espero, nos habrá llenado de compasión, de amor, de amistad, de cariño, de respeto. También confío que esto será base para el mundo que queremos y para el México que podamos construir.

Recibe un gran abrazo y sigamos con máxima protección, pero sin miedo.- LFGG