La Voz del Colibrí

Ayer, 27 de octubre el Dr. Ruy López Ridaura, director general del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades de México, señaló que hay una diferencia de 193,000 muertes adicionales a las esperadas para este año, y así vía CNN Latinoamérica agregó que 73% deberían se atribuidas a este mal, las cifras oficiales son 89,814 pérdidas.

¿Pero qué más vendrá para nuestro México?

Y no es que la neumonía atípica, la rifa del avión, y el final de la corrupción fueron ilusiones. Por favor querido lector, tampoco crea que soy anti gobierno, todo lo contrario, lo que quería decirle es que creo que en lo que podríamos dejar de creer es esa aceptación de que los ciudadanos no tenemos formas útiles y activas de participar, por esto les escribo. Porque creo que podemos hacer algo en ese tema.  

¿Ya saben a dónde voy? Mejor lo digo con todas sus letras, creo que el gobierno debería estar en manos de la gente, ¡Ya sé, ya sé! ¡Imposible! Esto debería ser natural y cotidiano pero ¿cómo lograrlo? Y si en otros países como Bélgica están creando formas de colaborar activamente, ¡si es posible!

Y es que no lo dije bien. Lo que necesitamos son toda clase de mecanismos enriquecidos, oportunidades, vías, momentos, procesos y tiempos en los que la sociedad pueda colaborar en forma ordenada y productiva con la función de gobierno. Que metamos las manos por esas tareas, porque como ya vimos, no pueden y no deberían estar solos.

¿Así está mejor? Que el gobierno y la gente colaboremos en forma constante, ¡que hablemos!

Un ejemplo del problema. Los benditos plurinominales, si preguntamos por qué existen, recibiremos explicaciones racionalizadas de ‘porque se necesitan’. ¡Pretextos! pretextos para decir que no hemos tenido ni la cabeza, ni la voluntad para encontrar soluciones causales. La verdad es que ese es un ejemplo de ‘un parche’, un parche mal pensado a una situación. Pero eso es apenas un ejemplo, creo que ya saben para dónde voy.

Hay muchas situaciones en las que necesita participar la ciudadanía, deberíamos estar comunicándonos, con nuestros funcionarios, colaborando para definir eso que los países desarrollados llaman “Leyes creadas por la razón”.

Esto es lo que les quería decir, que en 2020, el año maestro, este año de tantas despedidas y despertares, es el año en el que los mexicanos debemos tener la nueva idea de que la función  ‘gobierno’ necesita ayuda, y más allá, que no podemos dejar en manos del gremio de –servidores públicos- temas que van desde la definición de leyes y procesos hasta la operación de la administración pública.

Así que 2020, un año que es un terrible maestro, con todas sus despedidas y despertares, pero que también sea el año en el que los mexicanos comencemos a hacernos cargo de nuestra gobernanza, en democracia y con mecanismos genuinos.